Antes de nada queremos aclarar que esto es muy generalizado. Personalmente creemos que seme y uke es algo que no puede realmente definirse. No hay unas características que te hagan ser seme o uke. Es algo que te sientes y que de hecho demuestras en tu vida cotidiana con todos tus actos.

Como ya sabréis nosotras interpretamos una a los ukes y otra a los semes. ¿El motivo? Venus Angel es un uke real y Kageroh un seme real. Eso quiere decir que como tal nos comportamos siempre en nuestra vida de pareja.

Seme: Del verbo”semeru” que significa atacar, es el activo en la relación sexual. Suele ser más masculino y por lo general es el que inicia la relación. El que la busca.
Los parámetros tradicionales suelen mostrarlo como alguien frío y severo, normalmente violento. Una persona que incluso puede llegar a la violación para obtener al uke.
Pero los semes reales, los que encontrareis en nuestras novelas no son el típico MACHO. Son hombres que pueden ser cariñosos, dulces y atentos tanto como frios o severos. Depende de sus personalidades. Ya que no todos los semes tenemos la misma. Eso es un sinsentido. Y desde luego no todos los semes son más mayores que sus ukes.

Uke: Del verbo “ukeru” que significa recibir. Es el pasivo en las relaciones sexuales. Suele ser más delicado en sus acciones que el seme (excepto en casos especiales), pero no por eso es un débil de mente.
El uke tradicional suele ser representado como un niño temeroso y lleno de lágrimas, demasiado femenino quizás. Siempre pasivo personalmente y por lo general infantilizado.
Los ukes de nuestras novelas son tan masculinos como cualquier hombre, decididos y por supuesto disfrutan del sexo plenamente o incluso lo inician. Por supuesto que hay ukes (y semes) que lloran. Llorar es humano. Hay ukes infantiles, los hay maduros, violentos, encantadores, delicados, adultos, sádicos… Los ukes… son personas y como tal pueden ser como se les antoje. No hay reglas. Sólo una condición innata. Ser ukes.