Capítulo 10 - And Now, For the
Encore
El chico de cabello rosa, terminó de encender las velas,
haciendo una especie de círculo alrededor de la habitación,
en lo que a Ren le pareció una estrategia no muy segura.
Se sentó, por fin, sacando las demás cosas de la bolsa,
y rebuscando entre otras bolsas para mostrarle la cantidad de chucherías
que tenía.
El rubio aceptó un paquete de bizcochos, no sin antes fijarse
sutilmente en la fecha de expiración y que estuviera bien
cerrado, antes de aventurarse.
-Debimos poner un círculo de sal por dentro del otro…-
bajó la cara hablando de aquello como si fuera un ritual
satánico extraño –Invocamos a Ren… de
entre los muertos…- se echó a un lado recostándose
en el suelo y quitándole un bizcocho al rubio –Háblanos
de la cárcel… ¿estabas con otros en la celda?
¿Es como en las películas?
- Por favor.... háblanos en palabras, que no entendemos
código morse... – bromeó Dragon, recostándose
de lado en el piso, y riendo.
El rubio se rió, recordando los gritos de la chica. –
Sólo tenía un compañero de celda, pero no era
de máxima seguridad así que no estaba encerrado todo
el tiempo. Y es un poco más controlado, pero sigue sin ser
un lugar agradable.
-¿Estabas en el mismo lugar que los asesinos? ¿O
sólo había gente con delitos menores donde estabas
tú? ¿Te molesta hablarlo?- se acostó de cara
al techo acariciándose el abdomen y mirándolo de lado.
- Un poco, pero.... supongo que me hará bien, ya lo dejé
atrás después de todo. – sonrió un poco,
terminándose el bizcocho que tenía en la mano. –
No había mucha diferencia, sí, había asesinos,
aunque no asesinos en serie ni nadie especialmente peligroso. Más
bien, maleantes o culpables de crímenes de pasión.
Eso....
- Pero debiste conocer mucha gente interesante, ¿no? Igual
aprendiste algo. – Dragon lo miró, intrigado, imaginando
a saber qué cosa.
- Creo que tienes una visión nublada de eso, ¿no?
Slave se rió mirando a Dragon –Podrías sacarte
buenos contactos de allí…- se giró de lado en
el suelo y cogió una botella, abriéndola y girándose
hacia el techo de nuevo, bebiendo a morro y mirando el reflejo de
las luces de las velas en el techo. La dejó a un lado aunque
se había bebido bastante, como si fuera agua en lugar de
alcohol -¿Te pegaban?-preguntó mirándolo de
soslayo.
- Más que nada, al principio, sí. – respondió,
un tanto sentencioso.
Dragon empujó una de las botellas en su dirección,
sin decir nada, y tomando la que acababa de abrir Slave para beber
de la misma.
El moreno se giró de lado hacia él -¿Te violaban?-
preguntó pensando que seguro que sí o al menos sólo
con ver su físico era de imaginar.
- Por supuesto – sentenció de nuevo, bebiendo de la
botella que Dragon le acababa de pasar.
- Hum... – Dragon se movió de nuevo, incómodo
ante lo tenso que se había puesto todo, igualmente preguntando.
- ¿Todos los días?
Ren lo miró serio por un momento, aunque sus ojos parecían
un tanto idos. – Hasta los violadores necesitan descansar.....
– sonrió un poco luego, bebiendo otro trago.
Slave lo miró, desviando la mirada luego sintiendo un nudo
en el estómago por haber sacado el tema que se notaba que
le afectaba, imaginando que con más motivo no había
querido ir con ellos a las saunas –Y ahora… - se quedó
en la mitad de la pregunta y extendió la mano hacia él
dejándola cerca de él sobre el suelo -¿Estás
traumado?
El rubio lo miró, sorprendido, y sin poder evitar el echarse
a reír luego. – Nunca... lo siento, es que no esperaba
esa pregunta tan directa. – suspiró, calmándose
un poco y mirando la botella. – Supongo que tengo que admitir,
que no me hizo el alma de la fiesta precisamente. Te pones un poco....
Te acostumbras a tratar de ser invisible, aún cuando no funcione,
y te pones a la defensiva.
- Pero eso no es tan malo, la segunda parte. Es mejor estar preparado,
¿no? – le sonrió el chico de cabello rosa, a
pesar de que jamás se fijaba en nada, pero tampoco lo pensaba
mucho.
El moreno se levantó mirándolo –Tenías
cara de ido…- se sentó a su lado, recostándose
y apoyando la cara sobre una de sus piernas y pasándole la
mano por la espalda -¿Y no conociste a nadie agradable?
- Bueno, sí.... había un chico que solía hacerme
reír. Era incendiario. – murmuró, observándolo
un poco rojo, aunque tocando su mejilla luego. – Y había
otro también, pero no lo veía mucho.
- Entonces, sí hay gente interesante en la cárcel.
Yo creo que yo podría ser un incendiario. Me agrada el fuego...
– Dragon se rió, bebiendo más de la botella
que Slave parecía haber olvidado.
El moreno se rió, imaginándolo fácilmente
provocando un incendio –Vale… pero no practiques hoy…-
cerró los ojos a la caricia, rodeándole la cintura
ahora que veía que no iba a echarlo, pensando que lo hubiera
protegido de haber podido y le olió la camiseta notando el
alcohol embotándolo un poco.
- No voy a quemarlos a ustedes, qué poca fe.... –
Dragon sonrió, guiñando un ojo, y dejando caer su
cabeza totalmente hasta el suelo. Ahora mirándolos a través
del vidrio de la botella.
Slave se giró un poco cogiéndole la botella y bebiendo
un trago, pasándosela a Ren no muy seguro de si había
bebido algo. Igual, no quería dejarlo solo porque le parecía
que se sentía mal –Una vez me follé a un extranjero…
-murmuró.
El rubio bebió de la botella a pesar de que tenía
la otra al lado, sintiéndose un poco cansado. - ¿Fue
distinto?
- Yo creí que te habrías follado a muchos. Ahora
lo apuntaré en mi lista de “cosas para hacer”
-No… porque no me gustan mucho, los japoneses son mucho más
guapos… como sea… fue horrible…- se rió
un poco –Tenía mucho vello… y rizos en el culo…-
se rió aún más –Los cojones como coquitos…
y además se confundió conmigo… se le ocurrió
hacerme daño… le dije que no lo hiciera pero no me
hizo caso…
- ¿Daño? – Dragon frunció el ceño,
molesto aunque pareciese absurdo. – Espero que se lo hayas
devuelto- murmuró, mientras Ren se dedicaba a acariciarle
la mejilla al moreno.
-Sí…le mordí las bolas…- sonrió
por las caricias, entrecerrando los ojos y frotando un poco la cara
contra la pierna del rubio –No soporto que me hagan daño…
me pongo violento…- habló un poco más serio
bebiendo otro trago aunque ya estaba más que bebido –No
es eso lo que quiero…
- ¿Qué es lo que quieres? – le preguntó
el rubio, sin dejar de acariciarlo, a pesar de haberse puesto un
poco rojo de nuevo.
- Me preguntó si responderá.... – Dragon se
acostó de espaldas, igual aguzando el oído aunque
en el poco tiempo que llevaba de conocerlo, creía poder saber
lo que le gustaba.
Slave sonrió por lo que había dicho Dragon, pero
estaba muy borrado –No me gusta responder a eso… porque
no lo sé muy bien, lo que quiero ni podría llegar
a querer… sumisión… pero no abuso… y haría
lo que me pidiera… sentirme necesitado… No me llega
con cariño y libertad… porque no quiero libertad…
no lo sé… nadie me entiende…
Dragon se giró, dándoles la espalda, seguro de que
ya sabía lo que iba a pasar, y cerrando los ojos por un momento,
abriéndolos de nuevo para observar la luz de las velas.
- Quieres alguien que te guíe. Es natural, es lo que quieres
cuando no sabes lo que quieres. – le acarició el rostro
de nuevo, sonriendo un poco. – Nadie que te comprenda te haría
daño.
-Pero nadie me sabe tratar…- entrecerró los ojos girándose
de frente mirándolo -¿Y tú, qué quieres?
- No lo sé la verdad. Supongo que todos queremos alguien
que nos comprenda. – lo observó, meditando. –
Alguien que me trate con cariño, que no me utilice, ni intente
aprovecharse. Y que no me subestime.
Slave lo miró a los ojos pensando que de todos modos eso
parecía más fácil, porque a él no le
llegaba con el cariño -¿Alguna vez te sucedió
eso? ¿Estabas enamorado?
- No, nunca he estado enamorado. Me gustaba alguien, pero luego
fui a la cárcel, así que nunca sucedió nada.
– suspiró, echando la cabeza hacia atrás.
-Qué mierda…- susurró mirándolo y después
a Dragón porque hacía rato que le veía poniendo
nervioso su actitud -¿Y tú, Dragon? ¿Qué
quieres?
- No quiero nada. Si no quieres nada, eres feliz con lo que te
llega, y no te decepcionas con lo que no. – murmuró,
girándose de nuevo y estirando la mano para tomar la botella
de nuevo. – Supongo que ahora quiero hacerlo con un extranjero-
sonrió, bebiendo y dejando la botella de nuevo.
Slave se rió mirándolo –No… te dije que
era horrible… ¿para qué quieres eso? Y ¿sabes?
Si no quieres nada… nunca obtienes nada e igual te decepcionas…
porque tu vida está vacía… No puedes negarte
a ti mismo que quieres lo que quieres… No hablo bien borracho…-
se rió cerrando los labios.
- No, hablas bien – se rió, observándolo. –
Pero yo me voy a conseguir un extranjero especial, tú lo
revisas. Un actor de porno. ¿Sabías que Slave cumple
fantasías? – le comentó a Ren, riéndose
de nuevo.
- ¿Cumples fantasías? – lo miró, sonriendo.
- ¿Cómo es eso?
-Es… - se rió bebiendo un poco más sólo
porque tenía sed ahora y no quería moverse de su sitio
ya que lo estaban acariciando –Dragón tenía
la fantasía de que lo tocaban sin saber quien siquiera…
ni qué le harían y por eso fuimos a las saunas y le
llevé a tres tíos que había allí para
hacérsela verdad.
- Vaya... – se rió, pensando que hubiese sido mejor
no preguntar y recostándose un poco.
- Supongo que no me puedo quejar, quería algo y lo conseguí,
ya puedo morir contento, o no, me falta el extranjero porno atractivo.
-No conozco a muchos extranjeros y menos atractivos y además
que sean actores porno…- el moreno sonrió mirándolo
–y si conociera alguno, ya no te lo presentaría…
- ¿Por qué no? ¿Sólo se permitía
un deseo? Oh, espera... – empezó a contar con los dedos.
– Uno, mataste a ese tío, dos, me cumpliste la fantasía.
Tres.... tres... creo que me queda uno. Ren, ya te gastaste uno
con lo de tu venganza.
- Y a lo mejor me gaste los demás, en lo mismo- sonrió,
de manera distinta, pensando que no era ni cercano a suficiente.
-No… pero no quiero que te mueras mientras yo este vivo…
tendrás que vivir eternamente esperando a por tu actor porno
extranjero…- le dio un trago a la botella mirándolo
serio y luego sonrió al dejarla a un lado –Pero si
quieres, otra cosa haré lo que pueda…
- Vale, pero tendrás que cuidarme entonces. No vaya a ser
que conozca uno cuando estés distraído. – sonrió,
poniéndose de pie sólo para quitarle su botella y
beber de la misma.
Slave le sujetó el tobillo y se incorporó un poco,
amarrándose a la tela de sus pantalones y le mordió
sin fuerza entre las piernas. Rozándose la cara después
contra él y cerrando los ojos –Creí que ya te
cuidaba…
- No del actor porno... – se agachó, besándolo
profundamente. – Ahora tienes una meta.
Ren suspiró, sonriendo y procediendo a finalizar lo que
quedaba en la otra botella, aunque no era mucho. – Creo que
debería dormirme. No es bueno estar así de alcoholizado
y despierto.
El moreno sonrió cuando se rompió el beso, aún
algo inclinado atrás y le pasó las manos por las nalgas
y las piernas, mirando al rubio de soslayo mientras se acariciaba
la mejilla con el sexo de Dragon sobre la tela entrecerrando los
ojos –¿Seguro que no prefieres permanecer despierto?-
extendió la mano hacia él para que se acercase.
- No lo sé..... – negó con la cabeza, algo
mareado ya y mirando la mano que le ofrecía Slave.
- ¿Por qué no? Slave no muerde... a menos que se
lo pidas. – Dragon se rió, acariciándole la
cabeza al moreno, aún contra su sexo.
- Yo no haré nada que no queráis…- lamió
el pantalón de Dragon, abriéndoselo después
lentamente, acariciándole la piel con la lengua, conforme
se iba revelando y tomó su sexo en la boca al fin, recuperando
lo que habían dejado a medias con ansias y tirando un poco
de la mano del rubio para llevarla a su rostro acariciándose
con ella.
Dragon gimió, moviendo un poco la cadera y adentrando su
sexo en la boca del moreno, mientras que Ren le acariciaba el rostro,
tentativamente al inicio, y con un poco más de seguridad
luego, dejándose lleva, y bajando la mano por su cuello,
y hasta su pecho.
El moreno cerró los ojos sintiendo el movimiento del sexo
de Dragon en su boca y las caricias de Ren, y jadeó con fuerza
soltándole la mano al rubio y pasándola entre sus
piernas, acariciando su sexo sobre las ropas, sintiendo cómo
se dibujaba por encima de uno de sus muslos, endureciendo.
El rubio dejó de acariciarlo un momento, para desabrocharse
los pantalones, tomando la mano de Slave e introduciéndola
bajo su ropa interior, acariciándose con ella, antes de volver
a acariciar el pecho del moreno, mientras Dragon enredaba su dedos
en su negro cabello, moviéndose un poco más, y gimiendo
algo descontrolado, pero le estaba resultando difícil aguantar
luego de lo del bus.
Slave le bajó un poco el pantalón, mirándolo
de soslayo y sujetó su sexo con fuerza, acariciándolo
y cerrando los ojos de nuevo, dejándose llevar por la mano
de Dragon y los movimientos en su boca. Le sujetó las nalgas
al rubio, dejando su sexo un momento para apretarlas un poco entre
sus dedos al igual que empezaba a hacer en el chico de pelo rosado
y los aproximó lo suficiente para poder lamer ambos sexos,
alternando el que entraba en su boca y usando los dedos para acariciar
el ano de ambos. Alzó la mirada observando a Dragon y empujando
tres dedos en él con fuerza.
- Ah... – el chico gimió, sonriendo, e inclinándose
un poco para acercarse a Ren, besándolo en los labios con
suavidad, luego susurrándole algo, a la vez que el rubio
gemía, excitado.
- Slave, quiero que lo hagas con tu lengua. – le pidió
tras un momento de duda, acariciando su mejilla d nuevo.
El moreno lo miró a lo ojos, excitándose aún
más porque le dijera aquello y lamió sus sexo con
fuerza, antes de levantarse, agachándose a su espalda y tomando
los sexos de ambos con una mano, frotándolos en su interior
y uno contra el otro, mientras miraba la entrada del chico. Lamió
el espacio entre sus nalgas y la empujó con fuerza dentro
de él, notando cómo cedía aunque apretada.
Jadeó con fuerza contra su piel y la empujó de nuevo
de forma más profunda, moviéndola en su interior.
- Ah,.... más... rápido... – murmuró
el chico, jadeando, y apoyándose un poco contra Dragon, aunque
este ya se encontraba perdido en sus gemidos nuevamente, y acariciando
la mano de Slave por encima, mientras el moreno masajeaba sus sexos
juntos.
Slave le obedeció jadeando contra su piel, entrando y saliendo
de dentro de él, moviendo la lengua en su interior, lamiéndolo
de forma incesante y sintiendo el sabor de su piel, cerrando los
ojos casi enfebrecido, sujetó con la mano libre las nalgas
de Dragon aproximándolos más, para poder seguir jugando
con los dedos en su interior de forma más profunda, mientras
acariciaba sus sexos, notando la mano del chico de cabello rosa
acariciando la suya y entrelazando un poco los dedos con los suyos.
Sintiendo que su respiración temblaba contra la piel del
rubio a la vez que pujaba por hacer llegar su lengua de forma cada
vez más profunda en él.
Dragon volvió a besar a Ren, introduciendo la lengua en
su boca y acallando un poco sus gemidos, aún pegándose
más, sin soltar la mano de Slave que se movía diligentemente,
sobre ambos sexos. – Slave, mira hacia arriba... – le
pidió, mirándolo por encima del hombro del chico,
y lamiendo luego su hombro.
-...pero no te detengas. – añadió Ren, jadeando
con más fuerza, y sonriendo un poco.
El moreno alzó la vista a los ojos verdes del chico sin
detenerse, excitándose más y deslizando los dedos
del cuerpo de Dragon para sujetar los testículos de ambos,
acariciándolos y preguntándose si ambos estaban satisfechos
con como lo estaba haciendo, más preocupado por aquello que
por ninguna otra cosa. Tratando de esmerarse más en lamer
el interior de Ren y acariciar sus sexos.
- Te dije que cumplía fantasías.... – se rió
Dragon, gimiendo de nuevo, su sexo pulsando a más no poder.
Dejó escapar un gemido agudo, corriéndose por encima
de la mano de Slave e incluso manchando el sexo de Ren, haciéndolo
gemir también. El chico de cabello rosa, le sujetó
la mano al moreno deteniéndolo para salirse de debajo, dejándolo
sobre el sexo del rubio.
- Slave.... – Ren jadeó, sujetando su mano también.
– Quiero sentirte dentro de mí, quiero que me penetres.
Pero primero, limpia a Dragon, ¿quieres? – sonrió,
recordando lo que habían hablado antes.
-Sí…- se acercó un poco sin levantarse y sin
dejar de acariciar su sexo con suavidad sintiendo el semen de Dragon
facilitar los movimientos y deslizó la lengua por el muslo
del chico de cabello rosa limpiando unas gotas de semen, subiéndola
por sus testículos, lamiendo cada resquicio, ocupándose
de su sexo y mirando su rostro mientras lo hacía.
- Slave.... – Dragon jadeó, estremeciéndose
al sentir su lengua en su sexo aún adolorido, y acariciando
su cabello con suavidad. – Ya.... ya... para – se rió,
retirándose un poco y dejándose caer en el colchón
reído.
Slave se levantó con la cara un tanto encendida por la excitación
acumulada y lo miró a los ojos mientras se desnudaba, acercando
los labios a los suyos y entreabriéndolos jadeante, alzándole
un poco la cara con la suya, besándolo profundamente y empujando
la lengua contra la del rubio, sujetándole las nalgas apretándolo
contra su sexo y rozándose contra él un tanto desesperado,
separándose un poco de sus labios porque le costaba respirar.
Ren lo besó nuevamente de todas maneras, lamiendo su quijada
luego y bajando por su cuello. – Hazlo – le pidió-
Entra en mí.
El moreno jadeó con más fuerza, echando la cabeza
hacia atrás y sonriendo un poco porque se sentía feliz.
Lo besó de nuevo y lo alzó por las nalgas acostándolo
sobre una mesa de madera que estaba a un lado del círculo
de velas. Subiéndole las piernas por encima de sus hombros,
sujetándose a la mesa y penetrándolo profundamente,
moviéndose con fuerza, rápidamente dentro de él
y jadeando fuertemente, mirándolo a los ojos y agachándose
a besarlo profundamente. Se separó de nuevo, echándose
atrás y cerrando los ojos abriendo más los labios,
jadeando totalmente inmerso en aquello.
Ren gimió, apretándolo, entre sus piernas, y abrazándolo,
acariciando su espalda sudorosa, y echando la cabeza hacia atrás.
– No dejes de besarme.
Dragon se alzó un poco en la cama, observándolos
y riéndose un poco. Llevaba dos días pasándolo
de maravilla. Tomó la botella que aún contenía
algo en su interior, bebiendo un poco para refrescarse.
Slave lo miró a los ojos y se inclinó sobre él
besándolo apasionadamente, entrecerrándolos y soltando
sus piernas, dejando que él mismo se abrazase a él
usando una mano para acariciar su sexo entre ambos y la otra para
revolverle el cabello, acariciándole una mejilla y empujándose
dentro de él todo lo profundamente que podía. Dejó
de besarlo sólo por un segundo para mirarlo -¿Me acaricias?-
le pidió susurrando antes de besarlo de nuevo tal y como
le había dicho, sin esperar a su respuesta, ya que la aceptaría
fuera como fuera. Empujándose dentro de él como si
jamás se hubiera detenido ni por un momento.
Dragon se puso de pie, acercándose, sin ningún reparo
e introduciendo la botella entre los labios de ambos, como preguntándoles
si quería. Ren se separó, un momento de los labios
de Slave, dejando que vertiera el líquido en su boca, , el
mismo resbalando por su barbilla, y Dragon se agachó a lamerlo,
susurrando. – Buenas noches... –antes de besarlo, girando
el rostro luego para incluir a Slave en el beso, antes de ir a acostarse
definitivamente.
El rubio jugó con las lenguas de ambos, aún besando
más profundamente al moreno una vez que Dragon se hubo alejado,
gimiendo dentro de su boca. – No pares de tocarme hasta que
me corra, apriétalo. – gimió luego, mirándolo
a los ojos y acariciando un poco su cabello como le había
pedido.
-Hmpf…- el moreno tembló un poco, excitándose
por sus palabras y apretando su sexo todo lo que podía, acariciándolo
y sintiendo el calor que desprendía, las pulsaciones de su
sangre incluso. Jadeó contra sus labios antes de seguir besándolo,
sintiendo aún el sabor del licor que Dragon había
vertido y lamiéndolo de sus mejillas, metiendo su lengua
profundamente en la boca de Ren a cada lamida. Lo miró a
los ojos y movió un poco la cara para sentir más sus
caricias, apartando la mano que tenía en su mejilla para
acariciar sus pezones, apretando uno de ellos y jugando con él
entre los dedos, deseando satisfacerlo todo lo posible, hacía
tiempo que no se sentía tan poseído y la sensación
era insuperable. Habría hecho lo que fuera.
Ren se movió contra él, aumentando las sensaciones
en su cuerpo, , acariciándolo más a medida que sentía
aproximarse el orgasmo, cada toque del moreno, incendiándolo
por dentro. Enredó los dedos entre su cabello, de manera
juguetona, gimiendo y separándolo un poco para observarlo
a los ojos, preguntándose si sería capaz, y aguantándose
apenas sólo para esto. – Córrete... ahora...
– jadeó, relajando su control y permitiendo que las
sacudidas de su propio orgasmo invadieran su cuerpo.
-Ahhh…sí…- el moreno jadeó con fuerza
mirándolo a los ojos intensamente, como si no hubiera nada
más y se movió con más rapidez, notando cómo
su propio sexo reaccionaba a las contracciones de Ren, ansioso como
había estado por correrse, expulsando el semen violentamente
en su interior, al tiempo que sentía el de Ren en su mano
e incluso su pecho, lo observó salpicar su rostro y deslizó
la lengua entre sus propios labios lamiéndolo aún
sin dejar de observarlo. Su expresión al correrse y aún
después de haberlo hecho…
El rubio lo besó, sonriendo luego, recostándose del
todo contra la mesa y acariciando el rostro del moreno con suavidad.
- ¿Estás contento? Tenías razón, necesitaba
relajarme....
-Mucho…- lo miró entrecerrando los ojos para dejarse
acariciar con una suave sonrisa y lamió el semen de su cuerpo
poco a poco, parándose en él y besándolo cada
vez que lo lamía. Limpió su sexo especialmente y apoyó
la cara contra su pecho, hundiendo la nariz entre los suaves pectorales
del rubio. Dejó los labios contra su piel alzando la vista
para observarlo -¿Te llevo a la cama?
- Llévame- asintió el chico, acariciando su rostro
una vez más.
Slave lo recogió en brazos, aún sonriendo, aunque
de forma más abierta y se acostó al lado de Dragon,
mirándolo y tirando de él a pesar de que estaba ya
dormido. Subiéndolos a ambos un poco sobre él para
encontrar el modo de que cupieran los tres sin tener que irse a
dormir al suelo. Prefiriendo no recordar la cara de Dragon cuando
lo había mencionado el primer día -¿Así
estáis bien o me voy? Hay un sillón ahí.
Dragon estiró un brazo, rodeando su cuello, apenas mirándolo
un segundo antes de sumirse profundamente en el sueño de
nuevo, y Ren sonrió, observando al moreno. – No, así
está bien, nos la arreglaremos.
|