Capítulo 35- I Know Your Secret
- ¿Y se supone que soy yo el que duerme mucho? Apresúrense,
apresúrense! – los llamó Dragon, desde la entrada
ya, obviamente habiendo ingerido una de aquella pastillas hace poco.
- Está energético... – sonrió Ren, caminando
junto con Slave, y llevándolo de la cadena, aunque con suavidad.
-Está colocadísimo…- el moreno se rió,
mirándolo entrar y a Ryo sujetándolo en la entrada
por los hombros como si lo hubiese estado esperando. Miró
a Ren de soslayo –A Dragon le gusta mucho follar con ese tío…-
soltó de pronto como si fuera un sexto sentido extraño,
aunque la mayor parte de las veces decía las cosas equivocadamente
o no, sin preocupación alguna.
-Te estaba esperando- el moreno sonrió, dejándole
su cerveza vestido normalmente con unos jeans gastados y una camiseta,
porque era su día libre –No me apetecía quedarme
en casa ¿os molesta que me acople?
- Por mí está bien -sonrió, el rubio, mirando
a Slave, y sonriéndole de alguna manera más privada.
- ¿Te molesta a ti, Slave? – le preguntó, no
muy claramente de a qué se refería.
- Ryo! Estás vestido! Eso está mal... – se rió
Dragon, bebiendo de su cerveza inmediatamente, sin pensarlo ni un
segundo. – Te estuve esperando, ¿sabes? En tu casa,
llegas tarde....
-No sabía… y como aún no entrené esa
parte de mi cerebro, seguiré sin ser médium…y
estoy vestido porque hoy no trabajo- se quitó la camiseta
riéndose y colgándosela de los jeans metiendo un trozo
por la parte trasera de la cintura -¿Así mejor?
Slave miró a Ren negando con la cabeza –No…
sólo estaba pensando… que ya follaron dos veces, por
eso… Quiero hablar con Kevin y ver si puedo pelear…
aunque estoy cansado ahora…
- No pelees a menos que sientas que puedes ganar. – Ren lo
miró serio, por si acaso. – No te daré órdenes
en cuanto a eso, pero tampoco dejaré que subas allí
si estás débil. No quiero perderte....
- Mucho mejor! – Dragon se rió, abrazándose
a él y acariciándose con su pecho, sin soltar la cerveza,
de pronto tratando de recordar para qué había ido
a verlo a su casa.
Ryo se rió, pasándole la mano por el pelo y observándolo
-¿Tenias algún problema? ¿Necesitas dinero
o algo? No, ya sé… no podías soportar mi ausencia…-
le besó el pelo palmeándole las nalgas luego –Ven,
que voy a por otra cerveza.
-No… sólo estoy un poco cansado…- el moreno
se sentó en una de las banquetas al lado de Ren y cerca de
Ryo, observándolo de soslayo y fijándose de nuevo
en la marca de la bala en la espalda.
- Está bien.... el rubio le acarició el cabello a
Slave, pidiendo una cerveza para sí, ya intuyendo que Slave
sólo bebería agua y observando hacia donde se dirigía
su mirada.
Dragon siguió al moreno, aún pensando. – No
era un problema, era una idea, y era muy buena. Pero....
- No me digas eso ahora…- se rió sujetándole
la nuca con la mano frotándosela un poco y mirando a Slave
y a Ren al sentir su mirada. Les sonrió, sin comprender muy
bien qué les ocurría.
-Te pegaron un tiro…- susurró de pronto el moreno
sin más.
-Eso parece- Ryo sonrió bebiendo sin cejar de mirarlo e
igual de sentencioso que él, haciendo presión
Mientras tanto, un coche se detenía afuera y Axl se bajaba
de este entrando en el local. El portero le puso la mano en el pecho
para detener su paso –Necesitas una recomendación para
poder entrar chaval… ¿la llevas?
-No… recomiéndame tú…- lo miró
a los ojos como si nada y apartando la mano de su pecho como si
le fuese a contagiar algo.
-Muy gracioso, ahora lárgate…
El albino sacó la cartera contando varios billetes y se
los metió en la cinturilla del pantalón pasando sin
más ante la cara atónita del portero que sin duda
sentía que habían tocado su fibra sensible.
- ¿Y cómo recibiste ese tiro? ¿Te dolió?
Claro... – Dragon se sentó, curioso, mientras que el
rubio se limitaba a escuchar, ya que el chico parecía hacer
las preguntas por él, o al menos, una.
-No, me puso cachondo… tuve el mejor orgasmo de mi vida…
- se rió tocándose la marca con el dedo –Claro
que dolió sí… lo hizo mi padre… -bebió
un poco más mirando a la puerta como toda muestra de que
no le apetecía hablar de eso. Slave se giró bebiendo
agua en gran cantidad, perdiendo entonces el interés al ver
que había sido con un motivo “normal” para ese
ambiente.
Axl pasó entre la gente acercándose a la barra y
observando entre los cuerpos en movimiento, intentando reconocer
al chico que había visto en la foto.
- Es la primera vez que me alegro de ser huérfano- se rió
Dragon tratando de aligerar la situación, y preguntándose
si estaría cabreado con él por preguntar. De igual
manera, guindándosele encima como si eso quitase cualquier
cabreo. – Pero sigo buscando que me adopten...
-Creía que ya era tu papito…- el moreno se rió,
porque de todos modos no le afectaba tanto, sólo no quería
hablar de ello. Sonrió metiéndose una mano en el bolsillo
y abriendo un caramelo –Lo traje para ti… ¿ves?-
lo mordió, mostrándole que estaba relleno y se rió
antes de besarlo y jugar con él en la boca del chico deshaciéndolo.
Slave sonrió, sentándose en la barra del bar como
si nada, delante de Ren y agachándose a besarlo sólo
porque le habían dado envidia sana.
El albino se fijó entonces al ver al chico tatuado sentarse
en la barra, mirando al rubio al que besaba e identificándolo
sin duda, revisando la foto del periódico que le habían
pasado y guardándosela de nuevo en el bolsillo mientras se
aproximaba, sentándose a su lado sin decirles nada, limitándose
a pedir un paquete de cigarros.
-Le diré a Kevin que me encuentre a alguien… ¿vale?-preguntó
el moreno a Ren antes de levantarse.
- Vale, pero.... dame otro beso antes. – le sonrió,
halándolo de la cadena antes de que se fuera.
- Tus besos siempre saben bien.... – bromeó el chico
de cabello rosa, aún succionando lo que quedaba del caramelo
en su boca. – Esos son mis favoritos, por cierto – le
advirtió, como si debiera comprarle más.
Slave lo besó profundamente y luego de forma suave conforme
se separaba de él, Dejando que la cadena colgase por su pecho
y abdomen mientras iba junto al rubio.
-Lo tendré en cuenta…- Ryo se rió contra sus
labios bebiendo de nuevo y rozándole los pezones con un dedo
a través de la redecilla de la camiseta –Yo prefiero
estos… que son chiquitos pero no se gastan…
El albino se levantó entonces con el cigarro en los labios,
siguiendo a Slave entre la gente y aprovechando el espacio que este
iba haciendo.
- Ya sé! – gritó Dragon de pronto, sobresaltando
hasta a Ren, aunque el rubio sólo sonrió al ver que
no era nada y continuó bebiendo de su cerveza. – Quería
preguntarte si me dejas usar tu ducha siempre.
-Sí…claro- se rió el mayor que se había
quedado sorprendido con el grito espontáneo y mucho más
al escuchar después lo que venía. Slave se sentó
al lado de Ren de nuevo
-Dice que aún no tiene a nadie… al final tendrá
que sustituirme si nadie quiere enfrentarse a mí o tal vez
hacer torneos, dice que no sabe…- suspiró apoyando
la cara sobre sus brazos cruzados en la barra –Pero la gente
quiere verme a mí… algo es algo…
- Yo quiero verte a ti... No me interesan mucho las peleas de otra
manera – Ren le acarició el cabello, notando que estaba
decaído. – Tal vez podamos ir a otro lugar.
- O tal vez Ryo quiera pelear contigo de nuevo. ¿No quieres,
eh? No te va a matar... – trató de convencerlo Dragon,
pegándose a él, y sonriendo malditamente.
Slave miró a Ren de soslayo dejándose acariciar –A
mí me interesan…pero no si después yo no puedo
luchar también… no conozco otro sitio.
-Paso, paso… pelea tú con él y dices que he
sido yo…- le dio unos toquecitos en la cabeza sonriendo y
ni siquiera planteándoselo.
- Porque nos parecemos tanto.... – suspiró el chico
contrariado. – Fue una de las mejores peleas...
- Podríamos buscar. No puede ser el único. Si de
veras te interesa.... – continuó Ren, aunque no lo
convencía mucho. Al menos allí, Slave estaba protegido.
-Podría dedicarme a esto profesionalmente… mi entrenador
me lo dijo hace tiempo… Tal vez lo haga si no encuentro otra
forma de poder luchar…- murmuró el moreno mirando a
Ren, aunque también estaba escuchando a Dragon.
El novio de Kevin se acercó –Tienes un contrincante
Slave, 10 minutos para prepararte- le hizo una seña con la
cabeza para que fuera allí y el moreno alzó la cabeza
de la barra de pronto poniéndose nervioso por luchar sólo
porque había pensado que no podría.
- Gana – le susurró Ren, besándolo para darle
ánimos, antes de dejarlo ir, aún pensando en lo que
acababa de decir. No parecía una mala idea, y sería
más seguro.
- Y ¿qué esperamos?! Vamos allá! – exclamó
Dragon entusiasmado saltándole a Ryo delante.
-Pero ven conmigo…- Slave miró a Ren sin comprender
por qué no lo acompañaba y luego a Dragon, que se
había visto tan dispuesto a ir. Ryo se levanto, acabándose
la cerveza interesado y siguiendo a Dragon a la mesa donde se había
preparado él mismo.
- Claro, no quería estorbarte. – Ren se puso de pie,
tomando la mano de Slave, y acompañándolo.
El moreno sonrió de nuevo, caminando con él y sentándose
en la mesa, sacándose la correa con la cadena y entregándosela
a Ren, dejándose colocar las cuerdas en los pies y las manos
por el entrenador como siempre, mirando a su alrededor buscando
a su contrincante. Se separó de Ren respirando con fuerza
excitado a pesar de que estaba cansado por todo lo que le había
sucedido durante el día, había vuelto a aquel sueño
sicodélico, se sentía mejor que nunca, la música
sonaba de forma que no podía pensar en mucho más.
El corazón le retumbaba con fuerza en el pecho. Saltó
agarrándose a las cadenas del ring y giró sobre sí
mismo quedándose de pie allí. Estiró el cuello
haciéndolo crujir y se pasó la lengua por los labios
mirando a Ren y apoyando la espalda en las cadenas mientras esperaba
a que subiese su contrincante.
Un albino subió al otro lado del ring sonriendo casi angelicalmente,
mirando a Slave a los ojos cruzándose los propios magenta
con los negros del chico que entonces no dejó de observarlo.
El joven chico se quitó el jersey azul y lo dobló,
entregándoselo a uno de los chicos que parecían estar
allí animándolo sólo por ser bonito, cosa que
le parecía comprensible. Les sonrió y uno de los chicos
le sujetó la cintura del pantalón abriéndosela
para sorpresa del chico, que igualmente se dejó bajar los
pantalones y se descalzó sin quitarse los calcetines blancos
que llevaba caídos sobre los tobillos y mucho menos la ropa
interior. Una pequeña hojita cayó de la ropa sin que
nadie reparase en ella.
- Eso! Slave! Eres el mejor! – le gritó Dragon, emocionado
aunque ni comenzaba la pelea, seguro de que el otro chico no sabía
en qué se metía. Pero igual le agradecía el
esfuerzo. Se echó a reír, casi cayéndose hacia
atrás.
Ren, observando al moreno, y sonriendo un poco. Se le notaba lo
contento que estaba. Apretó la correa entre sus manos, sin
decir nada.
Kevin subió al ring sonriendo felizmente como siempre –Bueno
chicos… ¿sabéis que es esto?! – alzó
un papel en su mano y la gente empezó a gritar entusiasmada
–Esto es que nuestro nuevo chico… se llama Axl y tiene
un par de cojones! ¿Cree que puede matar a Slave? Lo vamos
a ver…
Slave sonrió al ver que había firmado aquel papel
en el que admitía la lucha a muerte y lo examinó de
arriba abajo. No era muy alto, parecía tener 17 o 18 y desde
luego, no era muy fuerte pero si estaba tan seguro de sí
mismo, por algo sería. No se fiaba una mierda de su cara
de “carebear”. El rubio se apartó tras contar
y el albino le sonrió un poco más a Slave.
-¿Muay-thai?- preguntó sin siquiera hacer guardia.
-Sí- sentenció el moreno, pasándose la mano
por la nariz, por el contrario tapándose la cara con las
manos protegidas y apoyándose en un pie, inclinándose
con todo el cuerpo y descargando el empeine contra su cuello. El
albino lo esquivó sujetándole el tobillo y haciéndolo
caer adelante. Slave se apoyó en las manos haciendo una voltereta
rápidamente, poniéndose en pie de nuevo y Axl se rió
suavemente aún sin hacer guardia y saltó al cuello
del moreno tan pronto se dio la vuelta, Slave lo sujetó de
los brazos tensando el abdomen al sentir los rodillazos que le golpeaban
siempre con la rodilla izquierda, la voz albino cada vez que los
descargaba, está vez no estaba tan colocado. Esta vez era
muy bueno ni siquiera lo había visto saltar -¿No se
suponía que estaba muerto? Ren…- susurró junto
a la boca del moreno que alterado le sujetó la cabeza con
las manos sin dejarlo apartarse y le golpeó con la suya,
apartándose al fin, escuchando los gritos excitados de la
gente y mirando a los ojos azules de Ren un poco asustado. ¿Quién
era ese tipo?
Axl notó la sangre, bajando por su frente y su pálida
ceja, goteando en su camiseta interior, manchando el blanco. Lo
miró a los ojos cambiando su expresión y haciendo
guardia. Sacudiendo la cabeza para apartarse el cabello y sonriendo
de nuevo, silbándole. –Ey… doggy…
Ren apretó más la correa, nervioso ante la mirada
que le había lanzado Slave. No parecía algo de él,
¿estaba asustado? Era la primera vez que se preocupaba viéndolo
pelear.
- Eh! Slave! Devuélvesela! Eso! – continuaba gritando
Dragon sin siquiera darse cuenta de nada más que no fuera
lo emocionante que estaba la pelea.
Ryo sonrió, observando a Dragon y se sentó en la
mesa con los brazos cruzados encendiendo un cigarro mientras observaba
la pelea, consciente de la mirada de Slave y de cómo Ren
apretaba las manos en la cadena.
Slave se giró, saltando por el aire y golpeándole
el hombro con el pie. Lo tiró al suelo, pero se levantó
rápidamente y giró sobre su propio pie alzando una
pierna y golpeándole circularmente, subiendo el pie hasta
la cara de Slave, golpeándolo y haciéndolo caer contra
las cadenas. El moreno respiró, fúrico y excitado,
tanto que no pensaba, estaba sudando y sangrando. El albino corrió
y saltó, aprovechando lo ligero de su cuerpo juntando los
codos y golpeándole en la cabeza con ellos juntos.
El moreno se cayó al suelo de cara, sangrando, Kevin tapándose
los ojos preocupado, pero Slave se levantó de nuevo, escupiendo
sangre y notando la que caía por su frente entre el cabello
–Te voy a matar…- susurró haciendo reír
a Axl. Aún así suavemente.
- No! Slave, hazlo pagar! Tú eres el campeón! –
Dragon seguía gritando, pero Ren seguía en silencio,
más preocupado que nunca, observando la sangre que manaba
de Slave, y apretando la cadena tanto, que ya empezaba a dolerle.
El chico de negro, se sacudió la sangre de delante de los
ojos y la emprendió a patadas contra el otro, evitando que
se le acercase lo más mínimo, el albino sin más
remedio que retroceder. Sonrió y saltó sobre las cadenas,
dándole la espalda, saltando y apoyando los pies en los hombros
de cuatro tíos hasta llegar la barra del bar corriendo por
ella. Slave lo miró un segundo sorprendido porque nunca antes
nadie había huido, aunque no parecía huir exactamente.
Miró a Ren, antes de saltar a la barra directamente siguiéndolo.
El albino empujó a la gente que trataba de agarrarlo, golpeándolos
y saliendo a la calle, parándose en el exterior y mirando
a la puerta, Slave tras él, la gente apartándose a
su paso. Su cara y sus actos no daban lugar a otra reacción.
- Slave! – Ren lo llamó, echando a correr tras de
ellos, luego, sin importarle anda más que el moreno ahora
mismo, y deteniéndose sólo cuando lo hubo encontrado,
respirando agitado tanto por la súbita carrera como por el
miedo que sentía.
Dragon permaneció por un momento totalmente quieto por el
shock, sacudiendo la cabeza luego, y halando a Ryo. – Vamos!
Seguro que le da su merecido por huir!
-Voy…- contestó Ryo que en realidad estaba flipando
con lo que veía, feliz de haberse decidido a ir esa noche.
Slave miró a Ren un momento y le hizo una seña para
que no se acercase, pero porque no quería que fuera a hacerle
daño.
Axl corrió hacia él al verlo, pegándole con
la rodilla en el pecho y tirándolo al suelo. El moreno sintió
el ahogo del golpe, ya no estaba razonando, lo levantó con
el pie por el estómago, lanzándolo por el aire al
suelo de vuelta y corrió hacia él. Saltó encima
de un coche corriendo por el techo para coger carrerilla alzándose
desde él y sujetándose los tobillos con las manos,
cayendo con las rodillas en su espalda. Le sujetó la muñeca
apoyando su brazo contra el cuerpo, levantándose y apoyando
el pie contra su omóplato tirándole del brazo a un
lado.
–AAAAAAAAH!!- gritó, por liberar fuerza, a la vez que
el albino dejó escapar un grito desgarrador apoyando la otra
mano en el suelo.
Slave lo levantó por la camiseta, arrastrándolo por
el suelo y se quedó mirando a la gente que estaba en la puerta.
Axl se había desmayado del dolor, su hombro colgando morbosamente.
El moreno miró a Ren a los ojos como si fuera lo único
que alcanzase a ver allí entre el cúmulo de rostros
difusos, por la alteración que sentía. Observó
a Dragón también y de nuevo a Ren, ahora no quería
matarlo y su mano se aferraba con fuerza a la camiseta del chico,
no se lo hubieran arrebatado ni entre tres, necesitaba saber por
qué le había dicho eso de Ren. No se movió,
jadeando como un animal con su mirada fija en los ojos azules de
su amo.
- Mátalo! – le gritó Dragon, como siempre entusiasmado
con la pelea, y mucho más contento ahora que Slave obviamente
había ganado, pero Ren negó con la cabeza, rompiendo
su propia promesa de no darle órdenes en esa situación,
y moviendo los labios para dibujar un “no” silencioso.
Podía ver que Slave no quería eso, y tampoco comprendía
la situación lo suficiente como para tomar esa decisión.
El moreno se quedó donde estaba sin moverse y sin escuchar
más que un murmullo de gente, los gritos deformados por los
latidos fuertes en sus oídos. Se sentía incluso un
poco mareado por la adrenalina, como si se hubiera colocado de más.
Sus ojos volvieron a Ren leyendo aquel no en sus labios y viendo
cómo negaba con la cabeza. Dejó caer al albino contra
el suelo y se llevó la mano a la cabeza notando que le dolía
horrible y dando un paso atrás mareado.
-Se va a caer…- susurró Ryo lo suficientemente alto
como para que Ren y Dragon lo escuchasen, ya que él ni loco
se acercaba a un hombre tan alterado sin ser allegado a él.
- Slave! –Dragon le gritó, haciendo el intento de
correr junto a él, pero para su sorpresa, Ren ya estaba a
su lado, sosteniéndolo.
- Vamos adentro, tienes que sentarte... – le susurró
como si le fuera a doler que le hablase muy alto.
-Ren…- el moreno se dejó llevar por Ren aún
sujetándose la cabeza –No!- señaló a
un tío que trataba de golpear al albino -¿Quieres
que te parta la cabeza?! Es mío!
Ryo se acercó y levantó al albino con los brazos,
colgándoselo al hombro y observando la mirada de Slave –Lo
llevo adentro…- le explicó, no fuera a pegarle o algo
así.
Kevin se acercó un poco suspirando –Venid conmigo…-
caminó unos pasos en la calle y les abrió la puerta
del almacén –Podéis pasar aquí…
a descansar… o lo que sea… diré que os traigan
unos hielos.
- Gracias.... – le sonrió Ren, abrazando un poco a
Slave contra sí, tratando de tranquilizarlo, y entrando en
el lugar.
Dragon los siguió, mirando a Ryo con cara de “¿por
qué ayudas a ese?”, pero sin decirle nada porque estaba
muy confundido ahora mismo. No se recuperaba de ver a Slave así
tampoco.
Ryo lo miró, dejando al chico sobre unas cajas de cartón
–Sólo estaban peleando, no es como que sea su archienemigo
o algo así…- le explicó a Dragon, comprendiendo
su mirada y también lo que sentía por el albino, pero
era algo inmaduro claro. Le golpeó la cara con la mano un
poco y el chico le sujetó la mano en cuanto abrió
los ojos yendo a incorporarse y gritando de nuevo, apretando las
mandíbulas y sujetándose el hombro –Por listo…-
se rió el mayor.
Slave se sentó en unas cajas cogiendo los hielos que le
traía el camarero que salió de nuevo y se los puso
en la frente apoyándose contra el pecho de Ren – Me
dijo… “¿no estaba muerto Ren?”
- ¿Cómo? – el rubio miró al otro chico,
volviendo la mirada a Slave y sujetando los hielos por el moreno,
abrazándolo contra sí. – Lo sabe....?
- Da igual, Slave es mi hermano y si alguien le hace daño
aunque sea en una pelea... – refunfuñó Dragon,
cruzándose de brazos y luego pensando que Ryo también
le había hecho daño, pero esto era distinto, ¿no?
-Bueno, estás en tu derecho de odiar a quien quieras, Dragon…-
el moreno se rió apoyándole una mano en el cuerpo
al albino y sujetándole con la otra la mano, observando las
lágrimas que tenía por las mejillas. Como fuera, a
él le daba lástima –Va a doler de cojones -
le advirtió. El albino lo miró furioso sin saber qué
hacía siquiera, pero demasiado adolorido.
-No lo sé…- Slave le susurró aún a Ren
–pero sabe tu nombre y sabe nuestra mentira…
-Aaaaaah!!!Mierda! Me cago en Dios!- el albino gritó al
sentir cómo el moreno le recolocaba el hombro dislocado y
Ryo se rió abiertamente.
-Y él en ti… está claro…
- Y yo me cago en ambos – se burló el chico de cabello
rosa, mostrándole la nalga.
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