El chico de cabello castaño salió del local, enroscando su trencita en un dedo. De nuevo la misma respuesta “Nosotros lo llamaremos”. De repente y Sanji tenía, razón, y podría utilizar sus fotografías para conseguir trabajo, aunque aún estaba dudoso. Igual pensaba ir de nuevo a por lo de segurata a ver si aún no conseguían a nadie. Pero había elegido esta ruta porque le permitía ir en una sola línea en vez de moverse de un lado a otro como si fuera trompo. Bostezó un tanto ruidosamente y se soltó la trencita por fin, continuando su camino.

Shin pasó corriendo a su lado mientras masticaba uno de los cordones de la capucha del chándal y se detuvo al ver que era Yûhi. En otro momento habría seguido entrenando pero al tratarse de Yûhi se detuvo –Hola…- lo observó sacándose el cordón de la boca un tanto cortado de pronto pensando que decirle “hola, tú pareces normal” no era una buena frase.

- Hola! – lo saludó, contento de ver a alguien que conocía, porque estaba algo aburrido con eso de sólo buscar trabajo la verdad. - ¿Haces ejercicio? – preguntó, pensando luego que eso era obvio y que pensaría que le hacía preguntas tontas.

-Sí, entreno…- le sonrió guardándose las manos en los bolsillos y observando el lugar del que había salido -¿Estabas buscando trabajo ahí?

El chico asintió aunque poniendo cara de pesadez luego. – Pero no creo que haya suerte con esos.... ¿No te interrumpo?

-No ¿está bien si te acompaño un rato? Estaba un poco cansado de todos modos…- se excusó, aunque no era verdad, pero no quería desaprovechar la oportunidad de conocerlo mejor y menos aún teniendo en cuenta que la conversación estaba resultando tan normal –Creo que estaban buscando trabajo de reponedor en un supermercado que hay cerca de mi casa… si quieres te lo puedo mirar hoy y ya te lo digo… después de comer o así…

- Sí, gracias! ¿No es molestia, verdad? Pero es que lo necesito..... – se metió las manos en los bolsillos algo avergonzado. – Y necesitaba un descanso de todas maneras. Si llego así al próximo rechazo, seguro que les salgo con algo no muy educado.

-No, no me molesta- Shin se rió mirándolo –… es bastante desesperante buscar un empleo… sobre todo si no tienes un montón de títulos de esos que tanto les gustan…- suspiró un poco mirando al suelo -¿Vives con Sanji, no?
- Sí, es mi mejor amigo. Pero por eso, casi nunca le puedo pagar la renta. – se rascó la cabeza sonriendo. – No soy muy buen compañero.

-Bueno, no es como que lo hagas adrede ¿no? No encontrar empleo… seguro que lo comprende… yo vivo en casa de mi madre aunque aún así me hace trabajar…- lo miró pensando que a él sí no le apetecía decirle de qué –ayer Kyo me dijo que Taiga quería darle una fiesta a su hermano… vosotros también vendréis… ¿vendrás?

- Por supuesto! Y más si es para el hermano de Taiga.... – exclamó entusiasmado. - ¿Por qué la fiesta?

-Porque es su cumpleaños, bueno, el de los dos claro… por eso digo que vosotros también debéis ir… He estado hablando con Kyo… habrá que comprar varias cosas… así que no sé, creo que pondremos parte cada uno para comprar alcohol y esas cosas- sonrió un poco pensando que jamás había estado en una fiesta y menos en una con botellón –Pero no te preocupes, cada cual pondrá lo que pueda sólo.

- No importa, aún tengo algo de dinero de mi último empleo. – le aseguró contando con aquella cantidad eterna de invitar a Sanji a comer. – No sabía que era el cumpleaños de Taiga, pero con lo mucho que habla claro.... Aún así, es típico de él celebrar a su hermano, como si no fuera su fiesta también. – sonrió, enternecido.

-Se llevan muy bien… debe ser agradable tener un hermano… ayer estuvieron bailando juntos y todo… aunque bueno, Taiga también bailó con Kyo…- se rió un poco –Se supone que para contarle lo de la fiesta de su hermano pero no hacía falta la distancia esa así que no sé…

- ¿Qué? ¿Crees que a Taiga le guste Kyo? Es difícil de saber..... pero parece que a todo el mundo le gusta Kyo, ¿no? – se rió, recordando la sonrisa que le había dirigido el moreno el día anterior y luego pensando en Sanji. – No sé, creo que vivir con Sanji es como tener un hermano, pero nunca tuve uno de verdad, así que no sé.

-Ya… no sé, yo me la paso solo…- dijo como meditando que le hubiera servido un compañero de piso, un hermano o lo que fuera y pensando después en lo que le había dicho sobre Kyo –Es porque Kyo es muy guapo… pero es verdad lo que dice Nagisa… no es lo mismo que te atraiga a que te guste… supongo… que eso debe molestarle a Kyo… que sólo vayan a él por su físico… no lo sé… ¿te estoy rallando?- lo miró rojo de pronto.

- No – negó con la cabeza riéndose. – No, si te estaba escuchando.... Y sí, la verdad, a mí me molestaría. Pero claro, no es mi caso. Por otro lado no sé, de todas maneras se acercan a ti ¿no? Hasta opciones tiene. Ahora ¿te parezco muy frío yo? – le sonrió, inclinando la cabeza.

-Opciones para acostarse con tíos… pero… ¿Qué tal si quisiera una relación en realidad? Pero no se fiase de que les guste de veras… no sé… a mí no me gustaría eso… que se acercaran a mí para eso- lo miró a los ojos –No me pareces frío ¿Por qué? Creo que nadie tiene tantos tíos detrás como él… - se rió un poco –Ni yo sé si me gusta o no… aunque creo que no, que sólo me parece atractivo.

- Sí, supongo que si lo pones así, debe ser difícil. Pero bueno, no parece molestarle. Claro que no se puede juzgar a la gente sólo por lo que muestran. – acordó, observándolo. – Y no lo sé, pensé que me veía frío por eso de que pueda elegir, como si fueran dulces.... – se echó a reír imaginando aquello. - ¿Ya te has acostado con él?

-Claro que no!- Shin lo miró más rojo imposible y luego le quitó la mirada porque lo ponía aún más nervioso –Ya te digo que ni sé si me gusta… y yo no hago esas cosas… de acostarme porque sí con alguien sólo porque me parezca guapo… y soy virgen además…- murmuró después carraspeando –Le di un beso… pero sólo porque… surgió de pronto… y me apartó…- sonrió un poco mirando al suelo.

- ¿Te apartó? Eso es raro, ¿no? – se acercó curioso porque pensaba que Kyo se besaba con cualquiera. – Y no quise ofenderte. No sabía...... Por eso pregunté. Yo tampoco soy así. Y también soy virgen. – se rió, nervioso por su confesión, pero le parecía que se la debía. Igual, todos lo sabían.

-No, no me ofendiste, es sólo que me puse nervioso…- se rió un poco mirándolo –y sí… es raro… pero no conmigo, porque él no quiere que a mí me guste, porque bueno, yo no querría una relación así… así que, ni aunque me gustara sería una relación posible…- lo miró a los ojos y apartó la vista –Está bien supongo… algunas relaciones simplemente, no pueden ser…- se encogió de hombros.

- Sí, creo que tienes razón. – suspiró un poco más serio. – Pero es mejor estar consciente de eso, ¿no? Que dejarse engañar.... Y ¿tú? ¿Cómo lo tomas? Bueno, supongo que si sólo te gusta físicamente, no es un gran problema.

-Al principio me lo tomé horrible y me puse a gritarle y de todo… y me porté fatal con él…- admitió bastante avergonzado –así que Teki ahora me odia… pero le pedí perdón… a Kyo! a Teki no…- comentó con el ceño fruncido –Y ahora… intento ser su amigo y comprenderlo… aunque no se me dé muy bien…- se rió levemente –Querría saber cómo es por dentro… no lo que muestra a todos… pero creo que eso sólo lo sabe Sly… si es que él lo sabe… no lo sé…- lo observó notando que estaba serio pero no quería ser indiscreto –Oye Yûhi… me agradas mucho ¿crees que pueda subir a estar contigo alguna tarde?... o cuando sea.

- Claro, a mí también me agradas. Tal vez los visite un día también, ¿vale? – asintió contento el chico. – Espera.... – sacó su cámara tomándole una fotografía y sonriendo. – No te molestó ¿verdad?
-No…- lo miró confundido y rojo a más no poder, pensando que sí le había dado vergüenza, pero eso era otra cosa y se acordaba del día que se habían reunido todos – Y vale, baja con nosotros algún día, pero no te sientes cerca de Sly… o sí, como quieras pero…- se rió pensando en como era.

- ¿Mejor llevo a Kaiba? No... – se rió recordando la cara del chico y sus cuentos y ya se lo imaginaba petrificado y rojo, escondiéndose. – Me sentaré contigo ¿está bien?

-Claro- le sonrió pensando en lo de Kaiba y se rió –Pobre Kaiba… a mí me da lástima… Sly siempre está abrazándose a todos y no sólo abrazándose… besándose… y metiéndose mano… bueno con Nagisa, no… a veces sí, pero luego le grita y eso- se rió guardándose las manos en los bolsillos –Te digo algo que me da vergüenza… ¿a veces no sientes deseos de hacerlo con alguien? Sólo porque te guste… por saber qué es…

- Bueno.... sí, claro. Y... – abrió los ojos de pronto acordándose de lo de la otra noche. -.... bueno, ya lo hice, con una chica. Es que antes........... sólo pensaba en chicos porque... – enrojeció, pensando que si eso no era una señal de que era gay, entonces tendría que esperarse a que Dios bajara del cielo y se lo dijera. – Pero la verdad....

-¿No te gustó?- lo miró a los ojos muy intrigado ahora en eso –Yo creía que me gustaban las chicas… Bueno, en realidad creía que no me gustaba nada, pero no quería admitirme gay… porque trabajo en un bar de alterne… de camarero… pero cuando empezó a gustarme Kyo…

- ¿Trabajas en un bar de alterne? Debe ser interesante.... – lo interrumpió de nuevo curioso y contestando luego. – No es que no me gustase, estuvo bien. Y tal vez sea sólo porque era mi primera vez y no sé mucho pero... seguía pensando en chicos así que no creo que fuera eso solamente.

-Tal vez deberías probar con un chico… a veces creo que debería probar… que no se acabará el mundo por acostarme con alguien sin estar enamorado… pero no sé… además me da algo de miedo… extraño…- lo miró a los ojos -¿me entiendes? No sé…- sonrió guardándose las manos en los bolsillos del chándal –y no es nada interesante… yo lo odio… no me agrada nada ver a todos esos chicos prostituyéndose… la mayoría están hechos unos losers…

- Bueno, pero no sé..... igual me parece interesante. – le sonrió, preguntándose si no pensaría que era un maldito. – Y sí te entiendo, claro... Podrías hacerlo con alguien en quien confíes, alguien a quien no le importe mucho eso, ¿no? Yo también me lo he planteado, pero ni sé por qué te aconsejo eso, si yo no me atrevo. Es que.... siguen siendo mis amigos, es raro, tienes razón.

-Sí… es raro… y si te sale mal… no sé…- se rió, moviendo las manos dentro de los suaves bolsillos del chándal –No podría hacerlo con mis amigos porque no tengo… quiero decir… sólo a Nagisa… y bueno, él es mi líder… no lo veo de ese modo… y Kyo… que bueno… con Kyo no, además de que él no querría por lo que antes te dije… y ya no tengo más amigos- se sacudió un poco la cabeza para apartarse el pelo –Pero siempre imagino…que debe ser agradable que alguien te acaricie… bueno no hablo sólo de sexo… que al menos le agrades…

- Pues tú me agradas, te acaricio si quieres – sonrió el chico, sin darse mucha cuenta de lo que decía. – Pero pensé que Kyo era muy cariñoso. Bueno... me refiero a con sus amigos, siempre está abrazado de alguien.

-Hum… sí y me acaricia…- dijo rojo como un tomate por lo que había dicho Yûhi –Pero me refiero a algo más íntimo… no me entiendes… ¿nunca has imaginado estar a solas con alguien y que te acaricie… que en ese momento… sólo sea eso? – explicó cada vez poniéndose mas rojo –Oye, Yûhi, yo no hablo así con nadie… así que no vayas a comentar lo que te digo…

- No, no iba a hacerlo. – negó con la cabeza. – No te preocupes. Tal vez..... tal vez hasta te cuente cosas mías en otro momento y así no te sientes tan expuesto.

-No te preocupes… no es eso… si te lo dije fue porque no sé, me pareció que podía decírtelo, aunque sí puedes contarme lo que quieras, no soy del tipo que le cuente las cosas a nadie- se sacó una mano del bolsillo para peinarse el cabello hacia delante de nuevo –Bueno… supongo que debería irme a comer

- Vale, y yo debo seguir en mi búsqueda, aún me quedan algunos lugares que visitar. – le sonrió observando cómo se peinaba. – Te veo por ahí. Y ya sabes, sube a verme cuando quieras.

-Lo mismo te digo- le sonrió siguiendo el camino corriendo y de nuevo masticando el cordón del chándal bastante extraño por haberle contado todo eso a un prácticamente desconocido pero, por otra parte también se sentía extrañamente desahogado.

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